viernes, 10 de agosto de 2012

Tempus Fugit II



Fragmentos de mi diario:


3 de enero de 1977

Hay hace un año exactamente. Nada ha cambiado, hoy el Sol se ha ocultado, mañana amanecerá de nuevo. Pero para mí ya no tiene el mismo brillo. Hoy el Sol no lucía como hace un año, llovía, el cielo quería hacerme compañía, quería derramar sus lagrimas, quería llorar tu ausencia, el cielo y yo estamos tristes.

¡Qué cruel que es el Sol! ¡Qué perverso! ¡Qué inhumano! Hace un año se puso, hoy también y el año que viene, de nuevo amanecerá para ponerse de nuevo.

Qué bella estabas apoyada en aquella roca, con la guitarra, envidiada, entre tus brazos, qué esplendorosa lucias iluminada por aquel Sol poniente, qué calor tenían tus palabras, que celestiales sonaban tus canciones, que tumulto de gozosas sensaciones me inundaban... Pero, impasible, insensible, el Sol seguía su camino y la noche ganaba la batalla al día.

¿Por qué si no te quiero hoy se acongoja mi corazón?. Hoy el Sol se ocultaba de nuevo, pero no lo veía, me lo impedían mis lágrimas, hoy la noche es más amenazadora que nunca porque no estás a mi lado.

Yo vivo pero no puedo vivir, yo lloro porque no puedo reír, yo deseo lo que no puedo desear, puedo sentir pero no experimentar lo que siento, solo me queda que vagar errante en mi contradicción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario